
Lo que más cuesta es llevar la idea de la cabeza a las manos, pero una vez hemos traspasado esa barrera y hemos conseguido modelar la cera, ya podemos comenzar a pensar en los acabados. Cada pieza es distinta y debe realizarse con la técnica que más se aproxime a la idea original. Creamos piezas pensando siempre en la forma de llevarlas, porque hay joyas para muchas y diferentes tipos de mujeres y ocasiones, pero permanece siempre el diseño, que define la marca de la casa, y está influido por el entorno geográfico por eso siempre decimos: "Hecho en Barcelona", una realidad que nos distingue.
Si no miramos lo que nos rodea es imposible crear porque toda la belleza está contenida ahí y es fuente de inspiración para todo artista o artesano, la diferencia con la realidad es la manera como se plasma en una tela o un metal.
Una vez tenemos la idea, empezamos por esculpir la cera hasta conseguir la forma deseada, se prepara el caucho donde fundiremos ese cera y ya tendremos el molde base para crear la pieza en el metal que queramos.
Y ya tenemos una pieza en metal, plata o oro y sólo falta elegir el mejor acabado, si colorista o de color metal, si con efecto brillante o con alguna piedra de color, el resultado final es una pieza original, acabada con todo detalle.